La edad
Dicen que uno de los signos de la madurez aparece el día en el que asumes que tu padre no es un superhombre. Supongo que a casi todos los hijos les pasa que tienen en un pedestal a sus padres y piensan que son capaces de todo porque siempre están ahí para cuidarnos, sobre todo cuando somos pequeños. Pero un buen día no pueden arreglar uno de nuestros problemas y somos nosotros mismos los que debemos coger el toro por los cuernos.
En mi caso fue más tarde que en el de la mayoría. Yo soy el hermano pequeño y fui bastante consentido. De forma que hasta bien pasada mi adolescencia yo me dedicaba a estudiar y poco más. Todo lo demás corría a cargo de mis padres. Pero mi padre se fue haciendo mayor y llegó el día en el que yo me convertí en un apoyo para él y no al revés.
De un tiempo a esta parte, mi padre ha tenido bastantes achaques, pero sobre todo empieza albergar un miedo a cualquier tipo de enfermedad. Supongo que es normal a determinada edad. Pero también se está volviendo un poco egoísta en algunos aspectos, hasta el punto de que a veces parece que solo piensa en su salud y lo demás le da igual. Últimamente está agobiado por unas pruebas y ha buscado informacion sobre el cancer de colon.
Todos sabemos que se trata de una enfermedad muy seria y que afecta a millones de personas en todo el mundo. Es uno de los cánceres más habituales entre personas de avanzada edad. El diagnóstico precoz es fundamental por lo que las autoridades sanitarias han implementado una prueba de detección que permite de forma cómoda avanzar en su prevención.
A mi padre no le han llegado los resultados pero ya está todo nervioso con el tema y me ha obligado a ayudarle con la búsqueda de información sobre el cancer de colon. Le he dicho que debe esperar porque no tiene por qué salir positivo pero él ya se pone lo peor. No me queda otra que ser comprensivo como él lo fue durante tantos años conmigo.